29/4/09

Y el tiempo mismo de ser tiempo llora

Nos vamos a Lisboa, así que no vendré por aquí en los próximos días. Prometo contaros a la vuelta del Indielisboa 09 y de la Cinemateca Portuguesa, y dejaré sendas rosas en vuestro nombre en las tumbas de Camões y de Pessoa en los Jerónimos.

Ahora os dejo tres poemas.


Luis de Camões 1524-1580


El primero es un soneto de Camões del que sólo encontré una versión en castellano de Roque Javier Laurenza, quizá, cuando vuelva, pueda traer aquí la versión original.

El tiempo acaba el año, el mes, la hora,
la fuerza, el arte y toda fortaleza;
el tiempo acaba triunfos y riqueza
y el tiempo mismo de ser tiempo llora.

Busca y acaba el tiempo donde mora
cualquier ingratitud, cualquier dureza,
mas no puede acabar con mi tristeza
si no le ayudáis vos, gentil señora.

El tiempo vuelve al claro sol oscuro,
al más dulce placer en lloro triste
y hasta la tempestad en gran bonanza.

Y de ablandar, con tiempo, estoy seguro
el pecho de diamante en que consiste
la pena y el placer de esta esperanza.



Fernando Pessoa (1888-1935),
en la Baixa, Lisboa


El segundo también es un soneto, de Pessoa, titulado Ah, um soneto..., que pertenece a a las poesías del heterónimo Álvaro de Campos, éste sí en versión original:


Meu coração é um almirante louco
que abandonou a profissâo do mar
e que a vai relembrando pouco a pouco
em casa a passear, a passear...

No movimento (eu mesmo me desloco
nesta cadeira, só de o imaginar)
o mar abandonado fica en foco
nos músculos cansados de parar.

Há saudades nas pernas e nos braços.
Há saudades no cérebro por fora.
Há grandes raivas feitas de cansaços.

Mas -esta é boa- era do coraçâo
que eu falava... e onde diabo estou eu agora
con almirante em vez de sensação?...


Y el tercero también es de Pessoa, pero de otro heterónimo, Bernardo Soares. El poema se publicó en Livro do Desassossego y se titula O peso de haver o mundo:


Passa no sopro de aragem
Que um momento a levantou,
Um vago anseio de viagem
Que o coração me toldou.

Será que em seu movimento
A brisa lembre a partida
Ou que a largueza do vento
Lembre o ar livre da ida?

Nâo sei, mas subitamente
Sinto a tristeza de estar
O sonho triste que há rente
Entre sonhar e sonhar.

1 comentario:

  1. Nunca fueron tan merecidas esas flores
    Disfruta de Lisboa
    Esperando....
    Un saludo

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