14/6/15

Disparos al borde del fracaso


A Garry Winogrand, sus colegas lo consideraban el príncipe de los fotógrafos de la calle.


Callejeó a menudo con su amiga Diane Arbus.



A pie de calle, vivía de la iluminación de los azares.

La fotografía no trata de lo que se fotografía, sino de cómo quedan las cosas al fotografiarlas.


En la encrucijada del mirar se desvivía por la búsqueda de la forma en la captura de lo real.

El hecho de fotografiar una cosa cambia esa cosa. Fotografío para descubrir qué se verá al fotografiar algo.


El mundo se le ofrecía como un incesante tiovivo de fotografías posibles.


A veces siento como si (...) el mundo fuera un lugar para el que he comprado una entrada. Un gran espectáculo dirigido a mí, como si nada fuera a suceder a menos que yo estuviera allí con mi cámara.

Habló alguna vez de la fotografía como un campo de batalla entre el asunto y la forma.



En los sesenta del siglo pasado y en las calles de Nueva York libró algunos de sus más venturosos combates con disparos decisivos.

Una gran fotografía bordea siempre el fracaso.

Winogrand dejó al morir más de 6.500 carretes de fotografías sin revelar. Lo suyo era disparar.


También sobre Marilyn, en el rodaje de La tentación vive arriba.

2 comentarios:

  1. Bonitas fotos. Igual te falta añadir Fotografías en lo de etiquetas. Por cierto, en la entrada de Criaturas también tienes unas fotos estupendas.
    Un saludo.

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  2. Tienes razón. Añado la etiqueta "fotografía".
    Un saludo.

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